En todas las empresas del grupo Acideka, así como en cada una de nuestras plantas y oficinas, estamos concienciados con este recurso hídrico, como no podría ser de otra manera al trabajar en el tratamiento de esta.

Lo primero que tratamos de hacer es reducir el consumo y en eso contribuye de manera importante el correcto mantenimiento de las instalaciones y de manera clave, las instalaciones distribuidoras y utilizadoras de agua dentro de fábrica.  Esto, junto con el control del consumo del agua de red, a través de los contadores de fábrica, nos ayuda a detectar la más leve fuga y poder actuar de la manera más rápida ante ella.

Otras actuaciones que realizamos:

• Realizar lavados eficientes de las cisternas cuando toca, evitando lavados innecesarios.
• Prueba de equipos que usan agua de forma masiva (Sistema contraincendios, …) en recirculación para devolver el agua a su depósito nodriza.
• En los productos que lo soportan, reutilización de los envases sin tener que lavar los mismos entre servicios.
• Instrucciones de trabajo optimizadas, con indicaciones de la cantidad de agua a utilizar en los lavados de los envases.

Reutilizamos el agua dentro de las instalaciones creando lazos cerrados que vuelvan a unir la salida del punto donde se utiliza el agua con el inicio del circuito. Algunos ejemplos de esta optimización:

• Contamos con la recuperación de los condensados del vapor de agua proveniente de las calderas que utilizamos para el calentamiento de los diferentes procesos.
• Recuperación del agua de refrigeración de los principales procesos de fabricación en la piscina de agua de consumo de la planta.

Por último, terminamos con el Reciclaje del agua que en nuestro caso equivaldría al tratamiento que le damos en nuestra depuradora que después de un tratamiento fisicoquímico nos permite devolverla con garantía de nuevo al rio Ebro para minimizar el impacto de la fábrica en el entorno.

Para el lavado de tanques de productos de Acideka, como puede ser la sosa caustica, se utiliza agua dulce.

Esta agua dulce, se bombea a la parte superior de los tanques (depósitos) de almacenamiento y se proyecta a gran presión a las paredes de estos tanques, mediante una máquina de limpieza llamada Butterworth, que consigue eliminar todo resto de productos de las paredes y fondo del tanque.